lunes, 31 de octubre de 2016

Blancos cuervos de la vida.

Mi tiempo en el cielo ha terminado, es hora de volver a las sombras donde pertenezco, mis visiones han terminado y me siguen recordando a donde pertenezco. Mis extremidades tiemblan, reconocen que esta fría roca es mas fuerte que yo, mi cuerpo ya no resiste tanta luz, la carne se ha ablandado y ya es inservible.
El sonido del silencio y la luz de la oscuridad me acogen en sus alas, blancos cuervos vuelan sobre mi cadáver, la vida me quita lo mio para volver a ser la muerte, porque es el curso de mi destino, donde la capucha negra y el hoz me protegen del día. Mi introducción ha sido largo y predecible, pero mi palabra sigue en pie, y cada eco del tiempo rebota en el silencio.
La gente que me mira con asco siento que me ha empezado a conocer, ellos saben quien soy, saben que estoy muerto por dentro pero intentaron que algo viviera aunque no hayan visto al horizonte donde los iré a buscar para quitarles sus vida..

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